Caos para regresar en el aeropuerto de Berlín: ¿fotem el camp de la UE?
El separatisme només plora per generar odi.
Caos Berlín. No és Espanya, és Berlin.
Junto al complejo de inferioridad/superioridad y la manipulación de la Historia, el victimismo es uno de los principales ingredientes del nacionalismo. Con todos ellos se construye un relato basado en el odio que busca justificar la secesión. Ja ho va explicar en Prat de la Riba i ho va actualitzar en Jordi Pujol durant 35 anys amb l´espanyansroba, ensvolenaixafar, comcollonuts i noensestimen. Mientras tanto, of course, se mete la mano en la carn d´olla y se afana lo que se puede.
Uno de las estrategias del nacionalismo es utilizar cualquier fallo, chapuza, error o mal funcionamiento de las infraestructuras para echar la culpa a “Espanya” y exigir la secesión. Es un clásico la manipulación de los desastres de Cercanías (aunque la competencia está transferida a la Generalitat), achacándolos a la dejadez de “l´Estat” y alegando la “inútil y elitista” inversión en el AVE (por cierto, todas las provincias catalanas están unidas por la alta velocidad).
El sábado por la noche se acumularon en un hangar de Berlín hasta 3.000 barcelonistas per tornar a casa després del partit. Los vuelos estaban previstos, el número de viajeros también. Pero no funcionó: “desastre”, “falta de información”, “caos absoluto”, “indigno el trato en el hangar”, “Berlín no está preparado”....Parece que incluso -en la hiperexacta Alemania- la megafonía de la terminal no funcionaba, la terminal asignada estaba en desuso y se vieron afectados incluso personas con discapacidad. Un meganyap.
S´imaginen que això hagués passat a Barcelona, o a Madrid, o a Sevilla? Los medios del Règim hubieran atronado con el “fotem el camp ja!”, los forcos hubieran incendiado Twitter durante tres días fustigando la falta de inversión (si en Barcelona) o los “servicios africanos” (si en Madrid o Sevilla), Rahola gritaría “volemmarxar!” en las tertulias y Mas callaría sonriendo torvamente tras sus gafas de pasta.
Pero no. Ha sido en Alemania. Y aunque el Barça ha presentado una queja formal a la UEFA, encara no ha sortit en Bartomeu cridant que “a ciertos poderes del Estado” Alemán no les ha gustado que el Barça gane a la Juventus o que “hay una factura política” del Gobierno de Rajoy por el prusés.
Coses del nacionalisme.
Dolça i manipulada Catalunya.