Durante estos meses, en los plenos de los diferentes municipios catalanes se está aprobando el Decálogo de buenas prácticas de la profesión periodística en los medios de comunicación locales. ¡Cuidado! esto es una auténtica autocensura para los medios para legitimar a la clase política dominante de subvencionar según la interesa. Todo aquel que no haga pueblo, ciudad o “país” ya se puede despedir de subvenciones.
Ya han desaparecido todos (yo no sé de ninguno) los medios escritos en castellano o bilingües por no hacer “país”, lo mismo ocurre con radio y TV, los que no hacen país no reciben ninguna frecuencia en Cataluña. Además de hacer país, ciudad o pueblo mediante el idioma, se exige un tratamiento agradable hacia el naZZZionalismo y odioso hacia España, tal como el “España nos roba”, “estat espanyol”… al tiempo de no denunciar el tema de las corrupciones (recordar que todas las corruptelas catalanas han tenido que ser denunciadas desde la prensa de Madrid. Con este decálogo adaptado a los grandes medios ya aprobado y puesto en marcha por medio del Colegio de Periodistas catalán, lo que se quiere conseguir es crear un nuevo oasis catalán. Ahora se quiere extender incluso a los pequeños medios de comunicación locales y comarcales. En este decálogo se incluyen cláusulas que fuerzan a estos pequeños medios a ser fieles al naZZZionalismo si aspiran a subsistir porque únicamente con subvenciones o publicidad institucional pueden lograrlo. Esta práctica sectaria del naZZZionalismo se está haciendo desde hace tiempo pero con esto se legitima las ayudas a los medios amigos. Es una estafa a los ciudadanos.
Creo que Cataluña es la única región española que tiene decálogo, en el resto de regiones es el código penal y la justicia quien pone orden en los excesos periodísticos.